Malos hábitos que envejecen a tu piel y le arrebatan el brillo

Ciudad de México.- Nuestra piel tiene una capacidad impresionante para protegernos e incluso recuperarse a pesar de la cantidad de elementos dañinos a los que está expuesta. Sin embargo, si muestra signos de desgaste, puede hacernos parecer viejos, cansados o poco saludables. Esto preocupa más a las mujeres de 50 años. Para abordar el problema de frente, debemos conocer qué hábitos en la rutina de belleza del rostro a partir de los 50 años desencadenan este proceso de envejecimiento de forma prematura. Hemos enumerado los principales a continuación.

Como todos sabemos, ciertos factores externos y las actividades diarias provocan el envejecimiento prematuro de la piel del rostro. Estos incluyen la contaminación, el maquillaje, la exposición al sol, las condiciones climáticas: viento, frío y estrés relacionado con el trabajo y el estilo de vida. Todos estos factores pueden acelerar la pérdida de elasticidad, lo que puede provocar la aparición de líneas finas y arrugas. Afortunadamente, hay algunos hábitos que podemos cambiar para combatir o retrasar los efectos dañinos del envejecimiento en la piel.

• No actualizar los productos de skincare, de acuerdo a la edad.

Es posible que te hayas apegado a la misma crema hidratante durante muchos años, pero lamentablemente, el cuidado de la piel que usaste a los 20 no será suficiente a los 30, 40 y más. De hecho, con la edad, las necesidades de la piel cambian radicalmente. Se adelgaza, se vuelve más seca, más sensible y pierde su elasticidad a medida que se agotan el colágeno y la elastina. 

• No usar crema hidratante.

De hecho, todos, independientemente de su tipo de piel o sus preocupaciones, ¡deberían aplicar una crema hidratante todos los días! Ayuda a luchar contra las arrugas prematuras y las líneas finas. Además, cuando la piel se seca, ¡el cuerpo reacciona produciendo más sebo! Y todos sabemos que el exceso de grasa puede obstruir los poros y hacer que aparezcan las espinillas .

• Frotar tus ojos.

La zona de los ojos es la más delicada del rostro, es un hecho. Cuando estamos cansadas o cuando nos maquillamos, es fácil caer en la trampa de frotarnos los ojos. Este movimiento puede hacer que se rompan pequeños vasos sanguíneos, lo que da como resultado ojeras que te hacen lucir cansada.

• Olvidarse de los exfoliantes.

A medida que envejecemos, la capacidad natural de nuestra piel para eliminar las células muertas disminuye. Sin una exfoliación semanal, la epidermis puede volverse desigual, opaca y sin brillo. Es por eso que la exfoliación es tan imperativa y no debe ignorarse.

Fuente: Todo para Ellas