Cómo

Tutorial para hacer tus propias toallitas desmaquillantes en casa

Podemos cuidar el ambiente haciendo ligeros cambios en la rutina de 'skincare', por ejemplo, usando toallitas desmaquillantes caseras
martes, 8 de noviembre de 2022 · 15:09

Ciudad de México.- ¿Te sorprende demasiado la rapidez con la que te acabas el paquete de discos desmaquillantes? No es de extrañar, parece que una mujer utiliza alrededor de 2 mil compresas al año. ¡Ay! Para el medio ambiente y la cartera no es lo mejor. Te invitamos a cambiar las costumbres con este tutorial tan fácil para hacer toallitas desmaquillantes lavables, muy en sintonía con la era de las rutinas de belleza orgánicas y los residuos cero, ¡empecemos!

Estas toallitas desmaquillantes lavables tendrán un lado limpiador y otro más suave que también será "decorativo" para un aspecto precioso. Y si tienes suerte, ¡ya tendrás todas las telas en tus armarios! Sí, puedes reciclar la ropa o las toallas. En total, necesitarás:

  • Una tela riza o esponja, para la parte de limpieza y desmaquillado. Asegúrate de reunir suficiente para cortar bastantes cuadrados del tamaño que quieras.
  • Una pieza de tela estampada para el lado suave y decorativo. 
  • Una regla.
  • Un par de tijeras.
  • Alfileres. Busca en tu kit de costura.
  • Hilo y agujas (o una máquina de coser).

En este tutorial, te proponemos hacer un lote de 10 almohadillas desmaquillantes lavables. Pero depende de ti ver cuántas requiere. Ahora bien, vayamos directo al grano:

Paso 1: De cada trozo de tela, corta 10 cuadrados de unos 10-15 centímetros. El tamaño depende realmente de tus preferencias. ¿Pequeños para los ojos? ¿Más grandes para la cara? Siéntete libre de mezclar y combinar.

Paso 2: Para cada toallita, ensambla un trozo de tela de rizo y un trozo de tela estampada, con los lados derechos juntos. Enseguida, únelos con alfileres, a un centímetro del borde.

Paso 3: A máquina o a mano, cose estos cuadrados de tela juntos a cinco milímetros del borde, dejando una abertura de unos cinco centímetros en un lado de cada uno (para poder darles la vuelta al derecho).

Paso 4: Cortar las esquinas en ángulo. Dale la vuelta a la tela para que los cuadrados queden al derecho. Desliza las tijeras por el interior y empuja suavemente las costuras hacia las esquinas para que éstas sobresalgan. También puedes utilizar un bolígrafo si te preocupa que esté demasiado afilado y dañe tus puntos.

Paso 5: En la abertura, remata y dobla los bordes de la tela sin coser, como si estuviera haciendo un dobladillo en el interior. Plancha la toallita para marcar estos pliegues.

Paso 6: Puntada superior a 0.5 centímetros del borde, a lo largo de todo el cuadrado. Ten cuidado, debes tomar los dobladillos de la apertura. Para guardarlos, puedes ponerlos en una pequeña cesta o bolsa. Cuando estén sucios, mételos en un bolsillo aparte.

Un consejo extra: A mano, ¡hazlo aún más sencillo! En el paso dos, ensambla un trozo de tela de rizo y un trozo de tela estampada, del revés, y cóselos con una puntada de festón. Además, tendrá un toque artesanal muy encantador. Si no quieres comprar tela, sólo asegúrate de que los retazos que vayas a reutilizar para esta tarea cumplan el criterio de ser suaves para la piel. Tiene que ser lo suficientemente delicado para no irritar el rostro. También debes elegir un tejido que no sea demasiado absorbente. Sería una pena vaciar la mitad de tu agua micelar u otro desmaquillante antes de poder aplicarlo en tu piel. Por último, si se puede lavar a máquina a 40º y secar en secadora, ¡es genial! Sólo hay que meterlo en una red de protección.

Fuente: Todo para Ellas