Ejercicios antirronquidos: 5 movimientos que evitarán que hagas ruido por la noche mientras duermes

Ciudad de México.- "Espero que no ronques". Esta es sin duda una de las experiencias que pueden arruinar el descanso de una noche, pero algunos ejercicios, podrían ayudarte a frenar esos ruidos no deseados.

Originalmente, el ronquido es la consecuencia de la relajación de tu cuerpo. Los músculos de la parte posterior de la garganta, del paladar blando, de la úvula y de la lengua se relajan durante el sueño profundo, lo que tiene como resultado la obstrucción de las vías respiratorias. La inspiración, y el encaminamiento del aire hacia los pulmones, hace "vibrar" la faringe y provoca el ruido de los ronquidos, pudiendo llegar hasta los 100 decibelios, es decir la contaminación acústica de un camión.

Los ronquidos pueden tener un impacto negativo en la calidad de vida. De hecho, los ronquidos pueden causar fatiga durante el día, riesgo de somnolencia y, desde el punto de vista relacional, incluso pueden ser la causa de muchas disputas en pareja. Para reducir los ronquidos y mejorar tus noches, hemos enumerado una serie de cinco ejercicios para hacer antes de irte a la cama.

El primero es fortalecer tu lengua. Para ello, se aconseja sacar la lengua durante cinco segundos y repetir el ejercicio tres o cuatro veces. Si quieres más resistencia, puedes pincharte la lengua con una cuchara pequeña. Para realizar este ejercicio, debes poner el lado hueco de la cuchara en tus labios y sacar la lengua mientras intentas empujar el utensilio de cocina.

El segundo truco será menos visible para tu pareja. De hecho, se trata de mover la lengua en la boca de derecha a izquierda. Más concretamente. Hay que tocar la mejilla derecha, luego la mejilla izquierda y empujar las mejillas hacia atrás con la lengua.

También sugerimos colocar los dedos en el hueco de las mejillas e intentar apartarlos con la lengua. Debes sentir una ligera tensión en el lado opuesto a la mejilla contra la que está empujando. Nuevamente, este ejercicio debe realizarse de tres a cuatro veces en cada lado.

Otra solución consiste en empujar los dientes frontales e intentar tragar simultáneamente. Si quieres estirar más, puedes poner los ojos en blanco mientras haces el ejercicio. Nuevamente, el ejercicio debe realizarse de tres a cuatro veces.

El quinto truco es sacar la lengua por la parte de atrás de la boca. Si haces esto frente a un espejo, verás una cosa extraña: la úvula se levanta, lo que fortalecerá los músculos de la parte posterior de la garganta.

Estos ejercicios son esencialmente ejercicios de resistencia para los músculos de la lengua y la garganta, para tonificarlos y evitar que se agiten o se comben cuando duermes. Esto te permitirá ayudarte a despertar con una sensación de frescura y evitar que tu pareja te pida el divorcio.

Fuente: Todo para Ellas