¿Duermes bien y sigues cansada? Descubre los hábitos que acaban con tu energía

Ciudad de México.- Dormiste lo suficiente, pero despiertas cansada y no entiendes qué sucede, pues no sólo llevas una rutina de descanso ejemplar, también sigues un plan alimenticio equilibrado y te ejercitas. En teoría, nada debería marchar mal y, sin embargo, lo hace. ¿No logras rendir hasta el final del día y la energía destaca por su ausencia? La explicación estaría relacionada con hábitos que, aunque no lo creas, te fatigan. 

Desde luego, el agotamiento puede derivarse de situaciones concretas, verbigracia, un periodo de estrés (producto de un proyecto en el trabajo o exámenes escolares), así como el embarazo o debido a que estás enferma. El problema es cuando no estás en ninguna de esas condiciones y el cansancio se adhiere a tu piel, convirtiéndose en un estado habitual, mismo que no hay que ignorar ¡Es una señal de alerta!

• Programas abrumadores.

Luego de un día arduo de trabajo, mirar un programa, película o serie luce como un plan bastante apetecible. No obstante, la trama podría provocar cansancio mental. Si la trama es estresante, corremos el riesgo de que esa sensación se nos quede gramada. De acuerdo con Leela R. Magavi, psiquiatra y directora médica regional de Community Psychiatry y MindPath Care Centers en California, "como seres humanos, somos criaturas emocionales, y muchos somos empáticos y captamos los sentimientos de los personajes de los programas de televisión y las películas".

• Planear con mucha antelación.

En ocasiones queremos controlar todo y que todo salga sin errores. Para ello, planificamos a un nivel obsesivo con tal de prever todas las versiones que podrían desplegarse de un escenario. Si bien la planificación es útil, estar constantemente pensando en lo que podría suceder nos conduciría a un capítulo de ansiedad, lo cual "afecta negativamente a la memoria y a la velocidad de procesamiento, lo que nos llevaría a estar más cansados y desmoralizados", afirma Magavi.

Fuente: Todo para ellas