Pies más suaves y sin callosidades; es posible con estos 3 tips de cuidado

Ciudad de México.- ¿Bonita de pies a cabeza? Si pensamos en cuidar nuestro cabello, a menudo descuidamos nuestros pies. Sin embargo, entre caminar, vestir calcetines que comprimen, usar tacones, etc. Podríamos decir que tienen una vida dura. ¿El resultado? pequeños dolores, calor, piel seca, uñas sin brillo. Pensando en ello, compartimos contigo tres recetas de cuidados caseros para olvidarnos de los problemas de pies.

No vamos a seguir hablando de reflexología, sino que vamos a compartir algunos datos para entender la importancia de darse una rutina especial de belleza para los pies. Sorprendentemente, nuestros pies no tienen glándulas sebáceas (como las palmas de las manos). Así que son naturalmente secos. En consecuencia de la fricción o compresión (por no hablar del peso del cuerpo), la piel se engrosa para fortalecerse  Así es como acabas con los talones ásperos e incluso agrietados.

1.- Exfoliación con piedra pómez: Este tratamiento elimina de forma sencilla y rápida las células muertas y permite que la piel se mantenga flexible. Un primer paso para evitar callos y durezas. Llena una palangana con agua tibia (¡pero no caliente!). Pon los pies en remojo durante unos cinco minutos. Con una piedra pómez, frota todo el pie para eliminar las células muertas. Sé directa, pero tampoco te arranques la piel. Seca bien los pies, sin olvidar hacerlo entre los dedos. Aplica una crema hidratante (como mínimo) o utiliza un tratamiento para nutrir. Hazlo una vez a la semana.

2.- Hidratación con aceite vegetal: Tras la exfoliación, vierte dos cucharadas de aceite vegetal hidratante (aceite de coco, oliva, almendras dulces, argán) y dos cucharadas de sal gruesa. Como opción, puedes añadir el jugo de un limón: purificará y blanqueará las uñas. ¡Mezcla bien!  Aplica en toda la superficie del pie, también con movimientos circulares. Presta especial atención a los talones. Aclara con agua tibia. ¡Los pies muy secos deberían amar esta receta!  

 3.- Tratamiento nutritivo: Al estar nutridos, deberían sufrir menos callos y asperezas. Puedes masajearlos con una crema. El verdadero secreto está en el tiempo de aplicación. Deja que el producto actúe toda la noche. En este caso, se envuelven los pies en un film transparente y luego se ponen los calcetines. ¿No es muy agradable, ni muy glamuroso? Pero de vez en cuando, ¡merece la pena!

Fuente: Todo para Ellas