De no creerse: 5 objetos con más gérmenes que una taza de baño

Ciudad de México.- Gérmenes: El problema es que a estos les gusta asentarse y crecer en lugares que uno no pensaría. Algunos de estos objetos son incluso más sucios que la taza de baño. Proliferan y estamos expuestos a ellos a diario, pero no todos son canales de enfermedades -afortunadamente-, pero pueden convertirse en nuestro peor enemigo.

Ya sea en casa (cuarto de baño, cocina, dormitorio...), en la oficina o fuera de ella, no se puede escapar de ellos. Desde los cajeros automáticos hasta los botones de los ascensores, desde las esponjas de la cocina hasta su tapete de yoga, los gérmenes se esconden absolutamente en todas partes. Aquí te contamos cuáles son los lugares más impuros.

1. La esponja de cocina: ¡Es sin duda el objeto más sucio de nuestra cocina! Según un estudio realizado por microbiólogos alemanes y publicado en la revista Scientific Reports en julio de 2017, se cree que cada centímetro cúbico de una esponja contiene unas 118 bacterias de 73 familias diferentes. Para evitar la multiplicación de los gérmenes, se aconseja escurrir bien la esponja después de cada uso y lavarla dos veces por semana.

2. El cepillo de dientes: Nuestro cepillo de dientes también es un verdadero caldo de cultivo. Para limitar la proliferación de bacterias, acláralo después de cada uso. Aunque se puede limpiar con bicarbonato de sodio, lo mejor es cambiarlo regularmente. Lo ideal es una vez cada dos meses, tanto si las cerdas estás desgastadas como si no. Por cierto ¡No lo guardes en el baño!

3. El teléfono móvil: Tenemos nuestros smartphones en las manos todo el tiempo, pero al igual que los mandos a distancia o los teclados de los ordenadores, no pensamos lo suficiente en limpiarlos. Sin embargo, muchas bacterias quedan atrapadas en los huecos entre los botones y en la cubierta protectora. Está incluso más sucia que las suelas de nuestros zapatos. ¡Imagínalo! 

4. Almohadas: Los gérmenes, las bacterias y los ácaros del polvo pululan en la ropa de cama si no se limpia con regularidad. Y las almohadas son las primeras afectadas. Para evitar que se conviertan en nidos de bacterias, se recomienda lavarlas periódicamente. Si son de material sintético, pueden lavarse a 40 °C o 60 °C. (Las almohadas de plumas deben lavarse en seco).

5. La tabla de cortar: Con el paso del tiempo y a pesar de los repetidos lavados, los huecos de nuestras tablas de cortar se llenan de todo tipo de alimentos. Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Arizona, incluso albergan el doble de bacterias fecales que una taza de baño.

Fuente: Todo para ellas