Natalofobia: Hablemos de la ansiedad por las celebraciones de fin de año

Ciudad de México.- En menos de un mes, celebraremos la Navidad. Habrá regalos, árbol, comida festiva y champán. Como ves, la agenda está cargada. Si para los niños esta época del año es mágica, para los adultos parece estar teñida de ansiedad. Según una encuesta el 44 por ciento de los padres de niños pequeños y el 39 por ciento de las mujeres dijeron estar muy estresadas por las celebraciones de fin de año. Este miedo puede incluso tomar la forma de una fobia, llamada natalofobia, es decir, miedo a la Navidad.

Generalmente es a partir del 1 de diciembre que se produce esta ansiedad. Cuanto más pasan los días, más aumenta el temor. En detalle, el estudio revela que para el 48 por ciento de las mujeres, la carga de trabajo mental asociada a este período es una fuente de ansiedad justificada por la organización de las vacaciones, la elección y compra de regalos, la supervisión de los niños, la preparación de las comida, etc. El cansancio acumulado durante las vacaciones también es motivo de preocupación para el 45 por ciento de los padres, mientras que el exceso de alcohol o comida preocupa al 40 por ciento de las mujeres de 18 a 34 años encuestadas.

La presión familiar, por otro lado, es un miedo compartido tanto por hombres como por mujeres. El 30 por ciento de los encuestados dice estar ansioso por este tema. La natalofobia puede entonces desencadenar trastornos físicos y psicológicos. Entonces es necesario hablarlo con los que te rodean, pero también con un profesional de la salud. Esta fobia puede agravar estados depresivos o ansiosos en muchas personas. Sobre todo, no te burles de una persona que te hable de su miedo a la temporada navideña. 

Esta fobia puede manifestarse con muchos síntomas, como la irritabilidad o el estrés, e incluso puede provocar un ataque de ansiedad. Por ello, el número de pacientes en las consultas de los psiquiatras aumenta en esta época. ¿Las causas? Depresión estacional, conflictos familiares, duelo, dificultades económicas, presión social. Además, puede que el cansancio de viajar largas distancias para una cita familiar agotadora o la presión de encontrar el regalo perfecto. 

Fuente: Todo para Ellas