Conoce qué es la regla de la modestia y por qué tus hijas no deben aprenderla

Ciudad de México.- Desde siempre se ha dicho que las niñas deben comportarse de cierta manera, sin embargo, imponer como debe ser su comportamiento impide que las pequeñas exploren el mundo y descubran lo que en realidad prefieren hacer, lo cual es indispensable para su desarrollo, por lo cual es bastante común que las madres dentro de familias muy tradicionalistas enseñen a sus hijas algunas normas de conducta como ser obedientes y sumisas, mejor conocidas como la regla de la modestia.

La llamada regla de la modestia es un tipo de comportamiento social en la que se intenta que las niñas sigan cierto tipo de estereotipos, en el que las pequeñas deben tener un perfil inferior al de los hombres, lo cual se define debido a que se ha creído desde hace siglos que ellos son más habilidosos en ciertas disciplinas, mientras que ellas deben ser dóciles y no mostrar sus capacidades. 

Esta famosa regla que se le ha enseñado a las niñas desde edades muy tempranas tiene severas consecuencias en su educación y desarrollo, pues hay muchas cosas que prefieren no expresar, por lo cual es importante que al tener una hija en casa procures evitar que esta norma sea parte de tu crianza, ya que esto puede dañar su autoestima y la seguridad que tiene en sí misma.

La mayoría de las niñas que fueron criadas con la regla de la modestia suelen desarrollar problemas como el síndrome de la impostora, el cual es un problema en el que las mujeres no se sienten capaces de cumplir con ciertas tareas, debido a que dudan de sus propias capacidades afectando severamente a su salud mental, aumentando la posibilidad de padecer depresión y ansiedad, dos condiciones que afectan la calidad de vida de una persona. 

En este sentido, resulta muy importante que si tienes hijas procures evitar la regla de la modestia, esto hará que tus pequeñas crezcan como mujeres seguras de sí mismas que puedan alcanzar las metas que se propongan, además de que sabrán cuándo y cómo luchar por sus derechos, pues nunca se sentirán menos que algún compañero varón, pues sabrán que ambos tienen las mismas capacidades.

Fuente: Todo para ellas