Cómo

Protege tus ojos: Deja de llorar cuando cortas cebollas con 3 tips

Es posible cortar cebolla sin que al hacerlo llores como si estuvieras viendo 'Siempre a tu lado'
jueves, 8 de septiembre de 2022 · 13:35

Ciudad de México.- ¿Alguna vez te has preguntado por qué cortar cebolla es todo un martirio? Siempre es la misma historia. Vas a preparar un guisado y para darle más sabor decides invitar a la cebolla al menú. Te decides a cortarla y esta vez piensas que alejándote de la tabla de picar por fin vas a conseguir que tus ojos no se conviertan en una regadera. Cuando menos lo esperas, los ojos te arden y no puedes parar de llorar.

Tita, personaje principal de Como agua para chocolate, sabía bien del tema. Ella advertía que "lo malo de llorar cuando uno pica cebolla no es el simple hecho de llorar, sino que a veces uno empieza, como quien dice, se pica, y ya no puede parar". Así que si estás buscando una excusa para desahogarte, la cebolla se convertirá en tu aliada. De lo contrario, la novela también da un sabio consejo para las amantes de la cocina. Pónganse "un pequeño trozo de cebolla en la mollera con el fin de evitar el molesto lagrimeo que se produce cuando uno la está cortando".

Cuando cortamos cebolla, ésta libera distintas sustancias químicas, como enzimas, aminoácidos sulfóxidos y compuestos azufrados, el cual desprende el gas que llega hasta los ojos. Al combinarse con la capa de agua presente en los ojos se forma ácido sulfúrico, el cual es irritante para los ojos. El resultado ya lo conoces bien. Tu cuerpo produce lágrimas para intentar diluir el ácido y proteger tus ojos.

Por fortuna existen algunos truquillos que pueden serte de ayuda si ya estás cansada de llorar frente a una cebolla y quieres cocinar tranquila. No te preocupes, no vas a tener que conseguir unos lentes de sol o unos googles, tampoco te vamos a recomendar que agotes el suministro de lágrimas viendo Siempre a tu lado para quedarte sin reservas al momento de cortar cebolla. Toma nota:

1.- Cuchillo afilado: En todas las cocinas hay un cuchillo favorito, aquel que corta las fibras con facilidad y de una sola pasada. Toma la herramienta más afilada, así se generará menos líquido. 

2.- Enfríala: Mete la cebolla al congelador por unos minutos. Al estar fría, el gas tardará más volatizarse y por tanto, llorarás menos. ¡Tus ojos lo agradecerán!

3.- No acumules: A medida que piques la cebolla, quítala de la tabla. Al acumularse en montones producirá más gas cerca de tus ojos y sufrirás. 

Fuente: Todo para Ellas